Un apóstol expresa su apoyo a los refugiados durante su visita a Europa

La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días continúa su prolongada asociación con ONGs internacionales para atender las imperiosas necesidades de los refugiados que entran en Europa. Hay apoyo en camino para proporcionar comida, refugio, ropa y equipos médicos.

La Iglesia sigue la admonición de Jesucristo de ayudar a los necesitados. Jesucristo enseñó a Sus seguidores a acoger al extranjero y a cuidar los unos de los otros (Mateo 25:35-36). En su reciente visita a Europa, el élder M. Russell Ballard del Quórum de los Doce  Apóstoles, el segundo consejo ejecutivo de la Iglesia, expresó su apoyo a estos esfuerzos y recabó impresiones de primera mano sobre la situación de refugiados en Europa. “Hay que ver en persona la magnitud de esta marea humana para creerlo”, expresó el élder Ballard. “He visto a nuestros miembros trabajar codo a codo con nuevos amigos de todas las  creencias y nacionalidades para aliviar el sufrimiento de los que han sido expulsados de  sus hogares y países. Me siento profundamente agradecido por el servicio dedicado de  todos los que socorren a los más necesitados”.

Las organizaciones con las que está trabajando la Iglesia incluyen la UNICEF, el Alto Comisionado de la ONU para Refugiados (UNHCR), Malteser Germany, el Centro de Gestión de Crisis de la República de Macedonia, Catholic Relief Services, Medici per i Diritti Umani Médicos por los Derechos Humanos (MEDU) y International Medical Corps. “Nos satisface trabajar con socios con tanta compasión y experiencia”, dijo el élder Patrick Kearon, presidente del Área de Europa de la Iglesia. “Hemos visto lo que hacen y tenemos la confianza absoluta en que nuestros esfuerzos conjuntos marcarán una diferencia en las vidas de los que huyen de la guerra y la miseria”.

El élder Ballard visitó dos albergues de refugiados a mediados de noviembre. En Berlín se reunió con representantes de la ONG Malteser Germany, a la que la Iglesia ha donado artículos de higiene y cuatro palés de juguetes para niños que han huido de sus casas y que han escapado de conflictos bélicos y otras dificultades. Le acompañaron el élder Craig C. Christensen de la Presidencia de los Setenta y su esposa, Debbie, y el élder Patrick Kearon, presidente del Área de Europa de la Iglesia y su esposa, Jennifer. Estos líderes tuvieron la oportunidad de visitar a las familias de refugiados y escuchar sus anhelos y desafíos.

Con la ayuda de la Iglesia, UNHCR atiende a refugiados dándoles información acerca de sus derechos y dándoles comida, refugio y atención médica.  Este proyecto, apoyado por la Iglesia, se enfocará en Grecia y los Balcanes. El élder Ballard y el élder Kearon visitaron un refugio en una de las islas griegas, el primer lugar donde llegan refugiados a Europa, para recabar detalles de la situación y expresar su gratitud por el  servicio que se presta a los necesitados.

La Iglesia también está patrocinando un proyecto de UNICEF para prestar ayuda a 225.000 niños de familias de refugiados en Italia, 90.000 en los próximos seis meses.  Los niños están recibiendo ropa, mantas y juguetes.  Habrá también paquetes de alimentos para niños pequeños y sus padres. La UNICEF crea espacios apropiados en refugios para que los niños vivan en un ambiente que les permita afrontar traumas y estrés.

A los niños refugiados de camino entre Grecia y Eslovenia se les dará mantas térmicas para protegerles del frío.

Catholic Relief Services ha sido un fiel asociado de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días durante muchos años.  Ambas organizaciones cooperarán para proporcionar comida, equipos de emergencia y atención psicológica a refugiados y sus familias en Serbia y Macedonia. La Iglesia también apoya a Caritas en Atenas para ayudar a refugiados.

MEDU (Physicians for Human Rights) es una organización sin ánimo de lucro con sede en Italia. La Iglesia ha financiado una unidad móvil para una iniciativa de MEDU.  Este vehículo entregará medicinas y equipos médicos y también comida y utensilios de cocina a los refugiados que en la actualidad se encuentran en Italia. Se dispondrá de una clínica al aire libre para cuidados médicos y psicológicos. MEDU fue creada por un grupo de médicos, amas de casa y otros voluntarios.

International Medical Corps proporciona servicios médicos y psicológicos a refugiados que llegan a varias islas griegas, incluyendo Samos y Kos. Con la ayuda financiera de la Iglesia, esta organización humanitaria prestará atención médica y psicológica a los refugiados. Los gravemente enfermos serán enviados a hospitales locales, donde recibirán cuidados intensivos.

La Iglesia ha estado proporcionando ayuda a refugiados de Medio Oriente durante más de diez años, donándoles miles de mantas, ropa, equipos médicos de emergencia, alimentos y otros recursos. Estos refugiados provienen de Jordania, el Líbano, Turquía y Siria. A mediados de septiembre se emitió un comunicado, explicando que los mormones de Europa, apoyados por la sede de la Iglesia en Estados Unidos, aumentaría su ayuda a los refugiados que huyen a Europa.