El voluntariado mormón se destaca en un nuevo estudio

A medida que La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos días (mormones) continúa recibiendo la atención de los medios de comunicación, un nuevo estudio se enfoca en los generosos donativos y el voluntariado de los Santos de los Últimos Días activos en los Estados Unidos. El profesor Ram Cnaan y otros miembros del cuerpo docente de la Universidad de Pennsylvania, publicaron un estudio titulado “Llamados a servir: El comportamiento pro social de los activos Santos de los Últimos Días”

Patrocinado por la Escuela de Ciencias Políticas y Prácticas Sociales de la Universidad de Pennsylvania, el equipo de investigadores analizó la información recabada entre 2,664 Santos de los Últimos Días activos y que asisten a la iglesia en todo el país. Basándose en sus resultados, los autores han llegado a la conclusión de que los Santos de los Últimos Días activos “se aprestan como voluntarios y donan significativamente más que el norteamericano promedio, y son más generosos con su tiempo y dinero que el quintil más alto entre la población religiosa en los Estados Unidos.”

Voluntariado

De acuerdo con la información, mientras que los voluntarios americanos dedican un promedio de 48 horas al año (4 horas por mes) a causas de caridad, un voluntario Santo de los Últimos Días activo, dedica 427.9 horas anuales (35.6 horas por mes) – una contribución equivalente a $9,140 anuales.

Por supuesto, un gran porcentaje del trabajo voluntario de los Santos de los Últimos Días es de carácter religioso; por ejemplo, los miembros donan tiempo para enseñar a los jóvenes sobre las Escrituras, o ayudan a preparar la capilla para los servicios dominicales, entre otras cosas. Aún así, el estudio pone de manifiesto que los miembros activos de la Iglesia también dedican 151.9 horas al año a servir en las iniciativas sociales y comunitarias de la Iglesia, tales como Boy Scouts de América o los programas mundiales de bienestar y de ayuda humanitaria. Aparte de estos esfuerzos, el estudio muestra que los miembros, de manera individual, donan 34 horas anuales adicionales a otras causas sociales no relacionadas con la Iglesia.

Donativos

Los resultados también indican que el 88.8 por ciento de los Santos de los Últimos Días activos obedecen las admoniciones de la Biblia en cuanto al diezmo (donar el 10 por ciento de su ingreso anual a la Iglesia).

Además del diezmo, un Santo de los Últimos Días activo dona anualmente un promedio de $1,171 a causas no relacionadas con la Iglesia. También dedican un promedio de $650 al programa de bienestar de la Iglesia. En pocas palabras, un miembro activo no solamente dona en promedio un 10 por ciento de su ingreso a la Iglesia, también dona $1,821 a otras causas sociales y comunitarias.

“En general, hemos encontrado que los miembros [Santos de los Últimos Días] son los miembros más pro sociales de la sociedad Americana,” indica este estudio. “Sin importar dónde vivan, son los más generosos con su tiempo y dinero.”

Los resultados publicados indican más adelante que estos “comportamientos pro sociales” son un reflejo de las enseñanzas de los Santos de los Últimos Días, las cuales ponen énfasis en el servicio y la caridad. Ciertamente, los miembros creen que Jesucristo manda a Sus discípulos tanto a servir como a amar a sus semejantes. Esta sublime enseñanza continúa resonando entre los Santos de los Últimos Días en todo el mundo. En un reciente discurso, el Presidente de la Iglesia, Thomas S. Monson, enseñó, “Al mirar hacia el cielo, inevitablemente aprendemos acerca de nuestra responsabilidad de servir a otros”.

Declaró después: “Para hallar la verdadera felicidad, debemos buscar dentro de nosotros mismos. Nadie ha aprendido el significado de la vida hasta que ha sometido su propio ser al servicio de sus semejantes. El servicio a otros es similar al deber, el cumplimiento del cual da como resultado el gozo verdadero. No vivimos solos – en nuestra ciudad, nuestra nación, o nuestro mundo. No existe una línea divisoria entre nuestra prosperidad y la miseria de nuestro vecino. ‘Ama a tu prójimo’ es más que una verdad divina. Es un modelo para alcanzar la perfección”