La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (los
mormones) prestó asistencia humanitaria cuando el lodo tóxico
inundó ciudades de Hungría. En los pocos días después de la
tragedia del vertido de lodo tóxico, la Iglesia proveyó un
significativo apoyo financiero, así como una destacada
participación voluntaria organizada para ayudar a paliar las
trágicas circunstancias de los afectados en la catástrofe.
A través de Manos Mormonas Que Ayudan, un proyecto de
servicio iniciativa de la Iglesia, el 9 y 11 de octubre,
voluntarios llegaron de Pápa, Győr, Veszprém, Szombathely,
Székesfehérvár y Budapest para asistir en los esfuerzos de limpieza
y restauración en Devecser. A través de sus esfuerzos también
trabajaron para calmar el dolor de las víctimas del desastre.
Organizaciones cívicas y caritativas siguen en el lugar para
prestar ayuda a miles de afectados. El fallo de una presa ocurrió
durante el día 4 de octubre causando uno de los mayores desastres
ecológicos de Hungría, ya que el lodo rojo tóxico se vertió en el
campo y las ciudades inundando los hogares. Casi un millón de
metros cúbicos de productos químicos altamente corrosivos
rápidamente inundaron los pueblos de la región de Ajka, Hungría. El
resultado fue una enorme devastación humana y ecológica, que
también amenazó cursos de agua y hábitat. Con sus chalecos
amarillos de "manos mormonas" sobre la ropa de protección, los
voluntarios se organizaron en equipos de trabajo, vertiendo y
arrastrando el lodo. La Iglesia, a través de su iniciativa de
servicio, ha respondido a muchos desastres, no sólo en Europa sino
en todo el mundo.
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