Altos funcionarios visitan la manzana del Templo

Haciendo un poco de historia, recuerdo el día 21 de mayo de 2015, en que se reunieron en el Ministerio de Justicia la Secretaria de Estado, Dña. Carmen Sánchez-Cortés Martín, y el Rector de la Universidad Brigham Young, Kevin J. Worthen, para firmar un acuerdo de cooperación entre ambos organismos.

Durante la visita, el Director General de Cooperación Jurídica Internacional y Relaciones con las Confesiones, D. Javier Herrera García-Canturri, comentó la buena experiencia que tuvieron él y su compañero, el entonces Subdirector General de Relaciones con las Confesiones, D. Ricardo García García, también presente, cuando ambos visitaron la Manzana del Templo de Madrid. Dña. Carmen dijo en respuesta que le gustaría mucho hacer la misma visita. Le dije que estábamos a su disposición. Y desde entonces, siempre que me encontraba con ambos, me decían que Dña. Carmen no se había olvidado de ese plan.

Finalmente, también un día veintiuno, pero esta vez del mes de febrero, y dos años después, en 2017, se cumplió ese antiguo deseo: A la una y cuarto de la tarde, llegaba en su segunda visita a la Manzana del Templo D. Javier Herrera, acompañado por Dña. Rocío López González, la nueva Directora de la Fundación Pluralismo y Convivencia. Pocos minutos después, llegaba D. Jaime Rossell Granados, Subdirector General de Relaciones con las Confesiones (sucesor de D. Ricardo García). Y Dña. Carmen llegó unos minutos después.

Estábamos esperando a los visitantes Cristina Villar y yo, representantes de la Iglesia en el Ministerio de Justicia, ella en el Patronato, un organismo al servicio de la Fundación Pluralismo y Convivencia, y yo en la Comisión Asesora de Libertad Religiosa.

La Secretaria de Estado de Justicia, que es la segunda en autoridad después del Ministro, se encarga, entre otros de gestionar los asuntos religiosos y la libertad de conciencia. Para ello, tiene la ayuda de la Dirección General de Cooperación Jurídica Internacional y Relaciones con las Confesiones, que, auxiliada a su vez por la Subdirección General de Relaciones con las Confesiones, se encarga de las relaciones ordinarias con las entidades religiosas.

La Subdirección tiene como misión promover la libertad religiosa mediante la cooperación con las confesiones que tienen reconocido el notorio arraigo. Para esto, tiene la ayuda de la Fundación Pluralismo y Convivencia, que utiliza para dirigir su trabajo un Patronato. Y como he dicho, Cristina Villar es la representante de la Iglesia en esta organización (es nuestra Patrona).

Después de una foto de los visitantes con Cristina y conmigo delante del Templo, empezamos visitando el centro de estaca, bajo la dirección de Alberto Fernández-Calvillo, ingeniero jefe de mantenimiento. Después fuimos al Centro de Historia Familiar (CHF), donde esperaban la directora, Mercedes Herrero, y el administrador de registros y servicios genealógicos de la Península Ibérica y Cabo Verde, Jesús Sánchez Chacón. Este último, después de enseñar el funcionamiento del CHF, hizo entrega a Dña. Carmen de un libro con 5 generaciones de sus antepasados, que incluía el árbol familiar y una explicación de las diferentes generaciones.

Para efectuar este trabajo, fue necesario que Jesús Sánchez y Juan Antonio Rodríguez, Administrador del Departamento para los países mediterráneos del Área de Europa,  visitaran el Registro Civil y el Archivo Municipal de Sevilla, el registro Civil de Candelario, Salamanca, y el Archivo Municipal de Trujillo. Y todo esto para deleite de la Secretaria de Estado de Justicia y demás visitantes (D. Jaime Rossell dijo que le gustaría visitar el centro para buscar los registros de sus antepasados). Después, fuimos al Instituto de Religión; allí esperaba Francisco Serrano Casas, Administrador de los Servicios de Autosuficiencia y del Fondo Perpetuo para la Educación en España, y el matrimonio misionero de Autosuficiencia, el Élder y la Hermana Kimball.

Las explicaciones de Francisco Serrano sobre los tres tipos de “cursos”, o “Grupos de Autosuficiencia” (“Mi Búsqueda de Empleo”, “Mi Educación para un Mejor Empleo” y “Crear y Hacer Crecer mi Negocio”), junto con el Fondo Perpetuo para la Educación, impresionó gratamente a los visitantes, por lo que supone de ayuda práctica a las personas en el campo de la educación y del empleo. Después de unos comentarios míos sobre los Institutos de Religión, como asignatura de religión para nuestros jóvenes en edad universitaria, fuimos al Centro de Capacitación de Misioneros (CCM). Allí los recibió el presidente, Robert N. Packer, y dirigió la visita Manuel Arjona, director del centro. Visitaron y departieron con diferentes grupos de misioneros, en inglés, en francés y en portugués. Y quedaron sorprendidos por la eficacia de los métodos de enseñanza de idiomas que utiliza el centro.

A las tres de la tarde, tuvimos un almuerzo en el comedor del CCM. Un número musical con piano y violín, de un misionero y una misionera, respectivamente, con una oración de bendición de los alimentos del presidente Packer, dio comienzo a una comida que nos permitió estrechar relaciones entre los comensales, algunas de las cuales, útiles y necesarias para resolver problemas relacionados con visados de los misioneros, y también con la microfilmación de algunos registros civiles.

Fue una visita que se hizo esperar, pero que será difícil de olvidar.