El 5 de junio se celebra el Día Mundial del Medio Ambiente. Organizaciones sin ánimo de lucro, activistas y líderes políticos se pronuncian sobre la contaminación, la pérdida de biodiversidad y la aceleración del cambio climático. Estos problemas afectan a personas de todo el mundo. Hay varias cosas que los padres y las familias pueden hacer en su propio ámbito, ya que es “por medio de cosas pequeñas y sencillas que se realizan grandes cosas”[1].
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El presidente Russell M. Nelson de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días nos exhorta a ser mayordomos sabios de la creación.2021 by Intellectual Reserve, Inc. All rights reserved.La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días invita a las familias a llevar a cabo una noche familiar para “edificar y fortalecer las relaciones familiares”. Estas noches familiares también pueden servir para infundir el agradecimiento y la práctica de la gestión del medio ambiente.
Aunque el tema de la responsabilidad medioambiental no se aborde desde el púlpito muy a menudo durante los servicios dominicales de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, las Escrituras y los profetas y apóstoles modernos nos enseñan que debemos ser buenos mayordomos de la tierra.
Dado que muchas personas de todo el mundo llaman la atención sobre la crisis actual de la contaminación, el cambio climático y la deforestación, puede ser difícil saber exactamente lo que los individuos y las familias pueden o deben hacer para cooperar en la labor de preservar este planeta.
Russell M. Nelson, Presidente de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días ha dicho: “En calidad de beneficiarios de la Creación divina, ¿qué debemos hacer? Debemos cuidar la tierra, ser mayordomos sabios de ella y conservarla para las futuras generaciones”[2].
Siendo así, ¿cómo podemos, como individuos, familias o amigos, seguir el consejo del presidente Nelson?
A continuación hay algunas sugerencias de cosas que podemos hacer durante las noches de hogar para convertirnos en sabios administradores de la tierra.
Evitar tirar basura y contaminar
Ezra Taft Benson enseñó que cuando mostramos irreverencia por la tierra, estamos mostrando irreverencia por Dios. “La irreverencia hacia Dios, hacia la vida y hacia nuestros semejantes toma la forma de cosas como evitar el desperdicio, como la negligente minería a cielo abierto, [y] la contaminación del agua y del aire. Pero estas son, después de todo, expresiones externas del hombre interior”[3].
Es importante interesarse en cómo se desechan los productos químicos y los materiales peligrosos. Las personas también pueden intentar compartir el coche o utilizar el transporte público cuando se desplacen al trabajo o a sus actividades. Durante las noches de hogar en casa, las familias pueden comprometerse a hacer cosas pequeñas y sencillas para ser mejores administradores, como elegir una actividad que requiera una contaminación mínima. Las familias pueden pasear juntas e incluso limpiar los desperdicios a lo largo del camino.
Pasar tiempo en contacto con la naturaleza
Planeen una caminata, una excursión o un paseo en bicicleta. Salgan de la ciudad y pasen el tiempo admirando las creaciones de Dios. Como enseñó Joseph F. Smith, tenemos el deber de experimentar y apreciar las bellezas de la naturaleza. “Como hijos de Dios, es nuestro deber a apreciarlo y adorarlo en Sus creaciones. Si asociáramos todo lo que es verdaderamente bueno y bello en la vida con pensamientos de Él, seríamos capaces de apreciar Su obra en toda la naturaleza”[4].
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Disfrutar de la belleza de la creación con la familia y los amigos fomenta la gratitud.2021 by Intellectual Reserve, Inc. All rights reserved.Un buen momento para hacerlo sería durante la noche de hogar o el domingo como una forma de adoración fuera de las paredes de la Iglesia y del hogar. Pueden pasear por un parque o acampar en las cercanías.
Aprender en cuanto al mundo que nos rodea
Las Escrituras nos aportan una gran perspectiva de por qué se nos ha mandado aprender sobre la tierra. [5] El Presidente en Funciones del Cuórum de los Doce Apóstoles, M. Russell Ballard nos pide: “piensen en lo que sucedería si nos dedicáramos un poco a observar los prodigios de la naturaleza que nos rodea y a aprender más de este mundo que Dios creó para nosotros […] . Para reverenciar de verdad a nuestro Creador tenemos que apreciar sus creaciones. Tenemos que dedicar tiempo a observar las maravillas de la naturaleza. En nuestros días es muy fácil dejarnos rodear de edificios de ladrillos y estructuras de cemento que nos impidan ver la vida a nuestro alrededor”[6].
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Aprender acerca del mundo que nos rodea empieza en la familia2021 by Intellectual Reserve, Inc. All rights reserved.En el Libro de Mormón, el profeta Alma nos enseña que la tierra y todas las cosas que hay sobre ella “testifican que hay un Creador Supremo”[7]. Como mayordomos de la tierra, es importante que dediquemos tiempo para aprender sobre la misma porque es una evidencia divina de la obra de Dios. Las familias pueden leer juntas las Escrituras sobre la tierra para aprender más sobre cómo cuidar mejor las creaciones de Dios.
Enseñar una actitud de gratitud hacia la tierra
Hay un gran gozo cuando las personas son felices con las cosas que Dios les ha confiado. Todos tenemos el deber de experimentar y apreciar las bellezas de la naturaleza. Durante las noches de hogar, las personas pueden expresar gratitud por la tierra y participar en actividades que las ayuden a desarrollar esa gratitud.
El élder M. Russell Ballard nos enseña la importancia de mostrar aprecio por la tierra, que pertenece a Dios, y nos advierte de que la falta de motivación puede ser perjudicial.
“Los que no sienten reverencia por las creaciones y los divinos atributos de Dios con seguridad sentirán poco aprecio por otras cosas sagradas. Esa falta de respeto por las creaciones se va profundizando hasta que la persona se vuelve completamente insensible a los sentimientos de los demás”. El élder Ballard dijo[8]:
La noche de hogar es un sitio excelente para aprender y fomentar una actitud de respeto y reverencia hacia la tierra.
[1] Alma 37:6
[2] Presidente Russell M. Nelson, La Creación, abril 2000.
[3] Ezra Taft Benson, This Nation Shall Endure, 1977.
[4] Citado por George B. Handley en: “The Environment Ethics of Mormon Belief”, BYU Studies, tomo XL, pág. 2, 2001.
[5] Doctrina y Convenios 101:32–34
[6] M. Russell Ballard, El amor de Dios y Sus creaciones, abril de 1988.
[7] Alma 30:44
[8] M. Russell Ballard, El amor de Dios y Sus creaciones, abril de 1988.