El presidente de misión de la rama junto con los hombres y mujeres
jóvenes pusieron carteles para anunciar la donación en el barrio en
el que se encuentra la capilla. En este punto se emplearon 2,5
horas de servicio.
Les fueron repartidos a los miembros de la Iglesia octavillas para
invitar a sus amigos y familiares. No es posible calcular con
exactitud las horas de servicio que se emplearon en el reparto y
comunicación a otras personas de esta actividad, pero la estimación
es de unas 6 horas contando con el diseño, impresión y distribución
(incluso se buzonearon parte ellas) de las 800 octavillas.
El día de la actividad las mujeres jóvenes se encargaron de
preparar los bocadillos y zumos para la recuperación de los
donantes. Horas de servicio donadas: 2 horas.
El transcurso de la actividad:
La hermandad de donantes de sangre llegó puntualmente a la capilla para empezar a atender a los donantes a las 10:00h, ya les estaban esperando cuatro donantes, dos de ellos vecinos del barrio.Como anécdota dos de los donantes de sangre que participaron en la actividad se acercaron desde Jaulín, un pueblo que se encuentra a más de 30km. de distancia de Zaragoza.
Las mujeres jóvenes estuvieron al tanto de que los hermanos que pudieron donar tuvieran su bocadillo y zumo para reponer las fuerzas durante toda la actividad, lo que supone una prestación de servicio de unas 14 horas.
Los datos:
Asistieron a la actividad unas 75 personas. Los donantes efectivos fueron 30 personas (20 bolsas de sangre) y los restantes no pudieron donar por diversos motivos, pero de una forma u otra apoyaron la actividad.El éxito de la actividad se fundamenta en el incremento de las donaciones (un 25% más) y participación en la actividad respecto del año pasado.