Nota de prensa

Apóstol mormón se dirige al Grupo Parlamentario de Todos los Partidos en la Cámara de los Lores del Reino Unido

El élder Jeffrey R. Holland analiza la ayuda humanitaria y la función de la religión en la resolución de conflictos

Ante el aumento de los conflictos religiosos en todo el mundo, el élder Jeffrey R. Holland, un apóstol de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, se dirigió al Grupo Parlamentario de Todos los Partidos (APPG, por sus siglas en inglés) para Asuntos Exteriores de la Cámara de los Lores en el Parlamento del Reino Unido, el miércoles 10 de junio de 2015 y habló sobre cómo la ayuda humanitaria puede ayudar.

Él habló después del Dr. Rowsch Shaways, viceprimer ministro de Iraq, quien también se dirigió a la asamblea junto con el Dr. Ali Nasser Muthanna de AMAR International y Sharon Eubank, la directora de Servicios Humanitarios de la Iglesia.

“Todos anhelamos el día cuando las espadas se conviertan en rejas de arados y las lanzas en hoces; pero, desafortunadamente, la violencia relacionada con la religión está aumentando, no disminuyendo, conforme nos adentramos en el siglo XXI”, dijo el élder Holland a los asistentes, que incluía a varios miembros del Parlamento. “Estos conflictos han desembocado en crisis humanitarias de proporciones inauditas en todo el mundo. La necesidad de ayuda sigue siendo enorme”.

El APPG para Asuntos Exteriores es un grupo informal donde los miembros del Parlamento y los líderes religiosos, de organizaciones benéficas y de corporaciones examinan temas de política exterior y celebran reuniones como ésta para fomentar entre los parlamentarios un análisis más amplio sobre las políticas. El hablar en estas reuniones es un gran honor, dada la función clave que desempeñan en la actuación del gobierno británico.

“Invité al élder Holland a venir hoy a la Cámara de los Lores para reunirse con varios de mis compañeros, miembros de la Cámara de los Lores”, dijo la presidenta del APPG para Asuntos Exteriores, la baronesa Emma Nicholson en una entrevista. “Quiero que él comparta su profundo acervo de conocimientos y comprensión: su corazón, su mente y su sabiduría. Mis colegas aquí, de todas las partes de la Cámara se afanan arduamente para poder ayudar y siempre andamos buscando conocimiento y maneras en que podamos hacer más”.

Al referirse al sufrimiento ocasionado por los conflictos, el élder Holland dijo: “Debido a que una porción considerable de estas situaciones las generan personas que profesan algún tipo de creencia religiosa (tan trágicamente malentendidas como puedan ser estas creencias), entonces sólo parece correcto que otras personas de igual convicción religiosa, pero más constructiva, sean quienes ayuden a poner remedio a estas situaciones y enmienden lo que se ha torcido. Es desde esta óptica, que La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días contempla todas sus labores de ayuda humanitaria”.

El élder Holland reseñó las ventajas que tienen las agrupaciones religiosas para proporcionar ayuda en estas situaciones, incluyendo el significado y el consuelo que las personas afectadas encuentran en su práctica religiosa y en la capacidad de las organizaciones religiosas de establecer confianza y diálogo, trascender fronteras nacionales y unir a beneficiarios dispares. Las organizaciones religiosas pueden ser potentes agentes hacia la tolerancia, el pluralismo y el manejo de conflictos y pueden facultar a las personas al brindarles apoyo teológico en contra de la injusticia, explicó.

“Al apelar a los valores más profundos del individuo, las religiones y las organizaciones religiosas poseen una capacidad sin igual para motivar a las personas, y al mismo tiempo, cultivar actitudes de perdón, reconciliación y la disposición a volver a ir en pos del ideal en sus vidas personales y en la sociedad. Dejar a un lado esta influencia positiva de la religión donde hay conflicto, sería dejar mucho de lado; yo diría, demasiado”, dijo el élder Holland. “Por causa de nuestras convicciones religiosas, convicciones que están fundamentadas en el mandato de amar a Dios y a nuestro prójimo como a nosotros mismos, es que patrocinamos los programas de ayuda humanitaria”.

“¡LDS Charities es magnífica!”, dijo la baronesa Nicholson [refiriéndose a la organización de beneficencia de la Iglesia]. “No puedo expresar cuánto admiro este imponente sistema que se ha establecido exclusivamente gracias a la caridad. Ambas organizaciones funcionan desde exactamente la misma fuente del bien común y del profundo deseo de dar a cada persona una oportunidad para hacerse cargo de sus propios asuntos, no sólo de sobrevivir, sino de tener un futuro. Es por ello que estoy tan contenta con esta relación que sostenemos”. En su calidad de fundadora y presidenta de AMAR, una organización internacional de beneficencia que socorre a comunidades en el Oriente Medio que afrontan conflictos, la baronesa Nicholson ha desarrollado una estrecha relación con LDS Charities, el órgano humanitario de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

 “Hay tanto trabajo por hacer, hay tanto sufrimiento, que no es posible que ninguna organización sola se dé abasto”, dijo Sharon Eubank en una entrevista.

La reunión brindó una oportunidad para que los oficiales de la Iglesia compartieran sus reflexiones y conocimientos que han adquirido al administrar las labores de ayuda en todo el mundo. Fue la primera vez que un líder de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días haya dirigido la palabra en una reunión en las Casas del Parlamento. En la reunión, la baronesa Nicholson agradeció al élder Holland su “magnífico discurso”.

“Estos miembros del Parlamento, particularmente en la Cámara de los Lores, están interesados en lo que estamos haciendo”, dijo el élder Holland en una entrevista. “Ellos están haciendo muchas de estas mismas cosas, y creo que ahora ellos nos ven como un aliado de importancia, un colaborador significativo, y pienso que ellos desean fomentar esta relación.

“Mi mensaje particular fue que nosotros tenemos una ventaja singular como organización religiosa, como iglesia, al creer lo que creemos en cuanto a la paternidad de Dios y la hermandad de hombres y mujeres”, dijo el élder Holland en una entrevista después de la reunión. “Y que nosotros no solamente estamos obligados por el evangelio de Jesucristo, sino además facultados para llegar hasta el necesitado, atender al pobre, vestir al desnudo y alimentar al hambriento”.

Si desea saber más acerca de LDS Charities y sus programas, visite MormonNewsroom.org.

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