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En la Conferencia sobre el Impacto Global de la Vacunación que tuvo lugar en España el 15 de junio de 2023, Gavi, la Alianza para las Vacunas, anunció una contribución de 3 millones de dólares estadounidenses de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días para apoyar una campaña histórica de vacunación contra la malaria en África.
La donación de la Iglesia reforzará los esfuerzos coordinados de Gavi, UNICEF, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y otros organismos para adquirir y distribuir la nueva vacuna RTS,S contra la malaria. Gracias a la ayuda de la Iglesia, unos 39 500 niños africanos recibirán las cuatro dosis necesarias para la inmunización contra la malaria como resultado directo de esta donación. Esto forma parte de una gran campaña que se llevará a cabo durante varios años para vacunar a 4,5 millones de niños hasta 2025.
“La malaria sigue siendo una de las enfermedades más mortíferas de África, que mata a miles de niños pequeños cada año”, dijo Guillaume Grosso, director de Participación del Sector Soberano y Privado, Relaciones con los Donantes y Campañas de Gavi. “Gracias a la financiación esencial de donantes como La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, podemos ayudar a proteger a más niños en riesgo a medida que se distribuye la vacuna”.
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Según Gavi, se estima que 475 000 niños menores de cinco años murieron de malaria en África en 2021, lo que la convierte en la mayor causa de muerte infantil en el continente, pero hasta hace poco no había ninguna vacuna disponible. Hace más de dieciocho años que se está desarrollando una vacuna contra la malaria. La vacuna RTS,S fue aprobada por la OMS para su uso generalizado en octubre de 2021, después de una exitosa prueba piloto en Ghana, Kenia y Malaui, donde aproximadamente un millón de niños recibieron la vacuna. Se trata de la primera vacuna contra la malaria aprobada por la OMS y actualmente se están desarrollando otras.
“Esta nueva vacuna RTS,S contra la malaria, que es sumamente necesaria, ayudará a proteger a miles de niños pequeños de esta enfermedad mortal”, ha declarado Gérald Caussé, Obispo Presidente de la Iglesia. “Nos sentimos muy agradecidos de formar parte de esta iniciativa histórica”.
La RTS,S actúa contra el Plasmodium falciparum, el parásito causante de la malaria que más muertes ocasiona en todo el mundo y que mayor prevalencia tiene en África. La RTS,S es la primera vacuna recomendada para prevenir la malaria en niños de zonas con transmisión de moderada a alta.
El Ministro de Salud de Ghana, Kwaku Agyeman-Manu, quien es Santo de los Últimos Días, afirmó que esta vacuna contra la malaria puede acabar con años de sufrimiento en el país a causa de esta “terrible enfermedad”.
“En las comunidades de todo mi país, las personas están entusiasmadas y la demanda es alta”, dijo.
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días ha apoyado a Gavi, la Alianza para las Vacunas, desde 2011. La Iglesia brinda apoyo monetario a destacados colaboradores mundiales de vacunación para adquirir y entregar vacunas, controlar enfermedades, responder a brotes, capacitar a los trabajadores de la salud y desarrollar programas de eliminación y erradicación. Estos esfuerzos dan como resultado más niños vacunados y menos vidas perdidas a causa de la malaria, el sarampión, la rubéola, el tétanos materno y neonatal, la poliomielitis, la diarrea, la neumonía, la fiebre amarilla y otras enfermedades.
“Los programas de vacunación son una inversión en capital humano”, declaró Austin Demby, Ministro de Sanidad de Sierra Leona. “Mejoran la salud pública, la esperanza de vida y el rendimiento laboral. Son un pago anticipado para la futura prosperidad económica”.
“Este esfuerzo tan esperado de vacunar a los niños contra la malaria realmente salvará vidas”, dijo la Presidenta General de la Sociedad de Socorro, Camille N. Johnson. “Es una manera hermosa en la que podemos ayudar a brindar alivio, como lo haría el Salvador”.
Labores humanitarias de la Iglesia de Jesucristo
Las labores humanitarias de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días alivian el sufrimiento, fomentan la autosuficiencia y brindan oportunidades de servicio. La Iglesia sigue la admonición de Jesucristo de alimentar al hambriento, dar de beber al sediento, acoger al forastero, cubrir al desnudo y visitar al enfermo y afligido.
La ayuda humanitaria de la Iglesia es posible gracias a las generosas donaciones y al voluntariado de los Santos de los Últimos Días y los amigos de la Iglesia. Los voluntarios aportan más de seis millones de horas de trabajo cada año para apoyar las iniciativas de bienestar.
La Iglesia patrocina proyectos de ayuda y desarrollo en más de 190 países y territorios, y brinda ayuda sin tener en cuenta la raza, la afiliación religiosa ni la nacionalidad. La ayuda se basa en los principios fundamentales de la responsabilidad personal, el apoyo de la comunidad, la autosuficiencia y la sostenibilidad.
El proyecto de vacunación contra la malaria está financiado en parte por LDS Charities Australia.
Acerca de Gavi, la Alianza para las Vacunas
Gavi es una organización internacional creada para mejorar el acceso a vacunas nuevas o poco utilizadas para los niños que viven en los países más pobres del mundo. Gavi ha ayudado a vacunar a casi mil millones de niños desde el año 2000, evitando más de dieciséis millones de muertes futuras.